viernes, 18 de abril de 2025

-La recuperación de las lagunas de Atapuerca estará lista en primavera de 2026.

 Enlace: https://www.burgosconecta.es

 Imagen de una de las lagunas de Atapuerca.

La Consejería de Medio Ambiente, Vivienda y Ordenación del Territorio de la Junta de Castilla y León va a llevar a cabo una ambiciosa actuación en Atapuerca para recuperar sus lagunas artificiales. Para ello se ha reservado una partida de 189.222,37. Estarán terminadas en la primavera de 2026.

Se van a llevar a cabo obras de arreglo en la zona de los aliviaderos y diques. Unas obras para las que será necesario vaciar la laguna tres y la instalación de esperas de armadura. También se realizarán impermeabilizaciones, la retirada del revestimiento de tierra de cobertura y la realización de un muro pantalla de hormigón armado en varias zonas. Cuando se realicen estas acciones se procederá al extendido de tierras extraídas y la reconstrucción del perfil del talud.

En las actuaciones está previsto la eliminación de la vegetación leñosa que comprometa la estabilidad y continuidad de las estructuras de los diques, como chopos y especies similares, y se realizará un tratamiento con fitocidas para evitar el rebrote de los árboles cortados.

 

Dado que una parte funciona como estación depuradora de aguas residuales, se procederá al arreglo y sustitución de los elementos dañados del cercado de la planta situada en los límites del complejo lagunar.

Para mejorar la observación de aves se van revisar, reforzar y arreglar las pasarelas y observatorios ornitológicos existentes. Además, se van a reponer señales y paneles de los diferentes itinerarios del complejo lagunar y se instalará la señalética asociada a los fondos que financian el proyecto.

 Todo el sistema lagunar recoge las aguas provenientes de varias fuentes y arroyos que nacen en Atapuerca. La Fuente San Cristóbal, Fuente Cubillo y Fuente Barrihuelo son las que aportan sus aguas al sistema lagunar a través de arroyo que discurren bordeando las lagunas.

Historia de las lagunas de Atapuerca

Estas lagunas se crearon en 2008 tras una invitación del Ayuntamiento a la administración regional para crear un humedal que sirviera de refugio a distintas especies de fauna. Y como corredor ecológico para numerosas especies de aves migratorias. Fue la Confederación Hidrográfica del Duero (CHD) la que se realizó el proyecto y las obras en terrenos municipales en una antigua zona húmeda que llegó a colmatarse. Son conocidas Prado de La Laguna y de Las Saperas. Una zona de la que existe documentación desde tiempo inmemorial en Atapuerca.

 

-'La huella del mal', estreno 4 de abril RTVE.es estrena el tráiler de 'La huella del mal', la primera película rodada en el yacimiento de Atapuerca.

Enlace: https://www.rtve.es/

 

RTVE.es estrena el tráiler de La huella del mal, la primera película rodada en el yacimiento de Atapuerca. Un thriller dirigido por Manuel Ríos San Martín y protagonizado por Blanca Suárez (Las chicas del cable, Me he hecho viral) y Daniel Grao (Hit, Perdida). La cinta cuenta con la participación de RTVE, se presentará en el Festival de Málaga y llega a los cines el 4 de abril.

 Blanca Suárez y Daniel Grao (d), actores de la película que dirige Manuel Ríos Sanmartín (c) y rodada en Burgos.

La película nos cuenta como, durante la visita guiada de un colegio al Centro de Arqueología Experimental (CAREX), unos chavales encuentran el cuerpo de una joven en el lugar donde debería estar la réplica de un enterramiento neandertal. La mujer muerta es Eva Santos, una chica del pueblo cercano de Atapuerca. Su cuerpo está desnudo y colocado en posición fetal. Un espeluznante crimen ritual que recuerda a otro ocurrido hace seis años en la misma zona. 

 El juez, Vázquez de Mella, le asigna el caso a los mismos policías que se encargaron entonces de aquel asesinato: Silvia Guzmán, ahora jefa de equipo, y Daniel Velarde, ex policía, que vuelve de forma puntual como asesor. Pero hay una tensión constante en el ambiente, existe un pasado que une a los investigadores.

Las investigaciones llevan a Silvia a explorar una cabaña abandonada en mitad del bosque mientras que Daniel acude al museo para interrogar a Samuel Henares, director del yacimiento. Silvia una vez allí es agredida por alguien que se da a fuga. ¿Habrá regresado el “asesino del yacimiento” que consiguió escapar hace seis años? Los policías estarán inmersos en espectaculares persecuciones que los acercarán al asesino y que los llevarán a desvelar los instintos, la violencia y la empatía como rasgo innato del ser humano.

"Siempre he creído en La huella del mal -asegura el director-, porque, para mí, tiene los tres elementos que necesita cualquier proyecto: un titular sorprendente, un cadáver actual en una excavación prehistórica; un entorno fascinante, como es el yacimiento de Atapuerca; y una filosofía de fondo que aúne ambos conceptos. De esta manera, nada resulta gratuito, todo está relacionado, tanto la trama de la investigación, como el lugar donde se desarrolla".

"Como dice un personaje de la novela: “La violencia es fruto de la selección natural, contribuyó a traernos hasta aquí, aunque ahora nos avergoncemos de ella y no sepamos bien cómo manejarla. Pero la violencia está, literalmente, en nuestro ADN”. No me bastaba hacer un thriller intenso, sino que pretendía algo más: que tuviera una filosofía de fondo".

"Porque Atapuerca no es solo un entorno fascinante, sino que los huesos allí encontrados nos generan preguntas acerca de lo que realmente nos hace humanos: ¿la violencia o la empatía? En la excavación encontramos tanto casos de canibalismo como de homínidos que ayudaron a otros que estaban enfermos hace ya cientos de miles de años", concluye el director.

 Completan el reparto Aria Bedmar (La cocinera de Castamar, Operación Barrio inglés), Víctor Palmero (Bajo sospecha, Todo lo hacen), Cosimo Fusco (Ángeles y demonios, 30 monedas), Daniel Horvath (Aída, Ventajas de viajar en tren), Pablo Rivero (Cuéntame, ¡Qué te juegas!), Fernando Cayo (La sombra de la ley, La fortaleza) y Juanma Cifuentes (El síndrome de Ulises, Señoras de hampa)

El guion de la película es del propio director y autor de la novela, Manuel Ríos San Martín, y Victoria Dal Vera. La dirección de fotografía corresponde a Ángel Iguácel.

El proyecto es una producción de La Charito Films (Diego Rodríguez y Javier Aguayo) con la producción asociada del productor alemán Peter Naderman (Nadcon).

 

-Descubierto en Atapuerca el primer rostro humano de Europa Occidental.

 Fuente: https://cadenaser.com

 Son los huesos faciales más antiguos conocidos de un homínido en Europa y tienen entre 1,4 y 1,1 millones de años. Revolucionan las teorías sobre migraciones hacia nuestro continente y lo ha anunciado un equipo español a través de la revista 'Nature'.

 Cara parcial de un homínido hallado en el yacimiento de la Sima del Elefante (sierra de Atapuerca)

 Lo han llamado "Pink" -por el grupo musical Pink Floyd y su álbum "The dark side of the moon", una referencia a una "cara oculta", aunque en este caso no sea la de la luna, sino la de uno de nuestros antepasados. También es "pink", el color rosa en inglés, por Rosa Huguet, la autora principal de la investigación. Hablamos con ella sobre la elección del nombre y nos cuenta, con una sonrisa, que "el nombre oficial que le han dado es el de Pink y a mi me parece muy bien. Pero a las mujeres del equipo les gusta decirme que también es por mi, y me hace mucha gracia, aunque quiero dejar bien claro que el hallazgo ha sido fruto del trabajo de todos".

Excavación en la Sima del Elefante de Atapuerca

El nombre y quien se lo puso es, en realidad, solo una anécdota. Digamos que es la pequeña broma "científica" que ha provocado también algunas sonrisas durante la presentación internacional que se ha hecho a través de una videoconferencia en 'Nature' en la que han respondido a preguntas de periodistas de todo el mundo. Los participantes han sido un dream-team de investigadores españoles encabezados por la citada Rosa Huguet, investigadora de IPHES-CERCA catalán, Xosé Pedro Rodríguez-Álvarez, investigador de la Universidad Rovira i Virgili, María Martinón-Torres Y José María Bermudez de Castro, ambos del Centro nacional de evolución humana de Burgos.

Los cuatro sonrieron cuando le preguntaron a Rosa por qué a estos huesos lo habían llamado "pink". Modesta, no mencionó la segunda acepción, pero sí lo hizo María Martinón-Torres: "A mí me gusta pensar que Pink es por Rosa, también", señaló.

Así que estos huesos, que vienen a revolucionar el mundo de la paleontología mundial, ya tienen su nombre "popular" y fácilmente reconocible. Se unen a otros, encontrados también en el yacimiento burgalés y que son 'hall of fame' de los nombres divertidos de hallazgos científicos de Atapuerca: Miguelón o Elvis son dos buenos ejemplos.

Sin embargo, más allá del nombre, vayamos a lo importante. Estos dos pequeños fragmentos de hueso son un fragmento interesantísimo de la cara de uno de nuestros antepasados más antiguos. La datación los coloca en un arco temporal entre 1,1 y 1,4 millones de años. Así que, como cuenta Rosa Huguet "estamos ante el rostro más antiguo, la cara más de un humano encontrado hasta ahora en Europa occidental". Y está, otra vez, en España, en la Sima del Elefante, de Atapuerca, Burgos.

 

¿Cómo encontraron a Pink?

En 2007, Huguet explica que "encontramos una mandíbula de homínido que pensamos que era mucho más antigua que las que se conocían hasta ahora para Europa occidental". Tenía entre 1,2 a 1,1 millones de años de antigüedad y estaba -también- en la famosa sima del Elefante. La llamaron ATE9-1 pero en ese momento "por prudencia y porque los resultados no eran concluyentes" no se pudo asignar de manera concluyente a un Homo Antecessor, que era el ser al que, por rango temporal, correspondía.

 Tras este descubrimiento llegamos a "Pink". En 2022, el equipo de Huguet, dos metros más abajo de donde estaba esta primera mandíbula, encontró "los restos fósiles de la cara media parcial de otro homínido". Estos fragmentos —a los que llamaron ATE7-1— son los que fueron llamados luego "Pink".

En las fotos que han publicado en 'Nature', vemos que son "una parte importante de dos huesos". El primero es un maxilar y el segundo, un hueso cigomático. Según Huget son "parte de la cara -sobre todo el pómulo de su lado izquierdo - de un individuo adulto que no podemos saber si era hombre o mujer".

Si se le coloca un espejo, o se simula con ordenador el otro lado de la cara, como han hecho los expertos, podemos ver mucho más claramente este que ya es "el rostro más antiguo de Europa occidental".

 

¿Y por qué es importante?

La teoría mayoritaria entre los paleoantropólogos señala que Eurasia -el supercontinente formado por Europa y Asia- fue colonizada, por primera vez, por homínidos parecidos a nosotros hace, al menos, 1,8 millones de años. Sin embargo, la evidencia de un asentamiento temprano de homínidos en la parte más occidental de Europa -por ejemplo aquí, en España- es muy escasa. Son fósiles "extremadamente fragmentados" que no nos han permitido hasta ahora entender cómo era la cara de nuestros antepasados. Los expertos dicen que, con lo poco que hay, tienen muy pocas pistas sobre cual era su aspecto físico.

Los fósiles del homo antecessor más antiguos encontrados hasta ahora -tienen 850.000 años- lo describen como "una cara delgada parecida a la de los humanos modernos". En la presentación del estudio, María Martinón ha explicado que “los antecessor (previos a los Sapiens) comparten con nosotros un rostro de apariencia más moderna y tienen una estructura nasal prominente".

Sin embargo los rasgos faciales de Pink son, según Martinón, "más primitivos, y se parecen más al Homo erectus, que es anterior al Antecessor. Sobre todo se parecen "en su estructura nasal plana y poco desarrollada". Nuestro pariente de hace 1,4 millones de años tenía la nariz chata y la cara bastante plana. "Unos rasgos, aunque no sea un término científico, un poco simiescos", dice Rosa Huguet.

Y además, aparte de hablarnos de su aspecto, la presencia de los huesos de "Pink" en el yacimiento de Atapuerca confirma otra cosa muy importante que viene a cambiar la explicación que teníamos hasta ahora sobre cómo fueron las primeras migraciones y la evolución de nuestros antepasados en Europa durante el pleistoceno temprano: Nos dicen que "Europa occidental estuvo habitada por al menos dos especies diferentes de homínidos durante esta época", explica Huguet. Primero el Homo aff. erectus, (Pink) y más tarde el H. antecessor.

¿Y qué significa que Pink es un homo aff. erectus?

Los autores señalan en su publicación en 'Nature' que "estos fragmentos de hueso de homínido no muestran las características modernas" de la parte media de la cara que se encuentran en los fósiles de Homo antecessor". Y, aunque los restos tienen cierta semejanza con el linaje del Homo erectus, "tampoco pueden asignarlo de manera concluyente a este grupo". Por tanto, provisionalmente han asignado los fósiles al grupo llamado Homo. aff. erectus. Al menos, a la espera de más pruebas.

Homo aff. erectus es una designación utilizada en paleontología para referirse a fósiles que muestran características similares a las del Homo erectus, pero que no se pueden clasificar con certeza dentro de esta especie. La abreviatura "aff." significa "affinis", que en latín significa afín o relacionado con.

¿Qué sabemos de cómo vivía?

Los datos paleo-ecológicos del nivel TE7 de la sima del elefante sugieren que "el paisaje de la Sierra de Atapuerca durante el Pleistoceno Temprano era un entorno en el que se combinaban áreas boscosas, praderas húmedas y fuentes de agua estacionales". Pink vivía en un hábitat rico en recursos.

En el mismo nivel donde se descubrió Pink, también hay muchas evidencias de la presencia y actividad de homininos durante el Pleistoceno Temprano. Los investigadores han encontrado herramientas de piedra y restos de animales con marcas de corte, lo que indica "el uso de tecnología lítica para procesar animales".

El Dr. Xosé Pedro Rodríguez-Álvarez, especialista en industrias líticas, ha contado que "aunque las herramientas de cuarzo y sílex encontradas son simples, sugieren que subsistían con ellas y, por tanto, nos hablan de la capacidad de estos homininos para aprovechar los recursos disponibles en su entorno.”

 Las marcas de corte identificadas en los restos animales proporcionan pruebas claras de que estas herramientas se utilizaron para el procesamiento de cadáveres. La Dra. Rosa Huguet, experta en tafonomía, cuenta que "con ello sabemos qeu los primeros europeos tenían un conocimiento profundo de los recursos animales disponibles y sabían cómo explotarlos sistemáticamente.”

 Las herramientas de piedra y los huesos de animales con marcas de cortes que se han encontrado a su lado, junto a otros restos paleo-ecológicos del sitio, "ofrecen información sobre el entorno en el que vivió este homínido y sobre su estilo de vida", señalan los autores.

Un futuro muy prometedor

Marina Mosquera, directora de IPHES-CERCA y una de las investigadoras principales del Proyecto Atapuerca: “Este yacimiento es crucial para comprender nuestros orígenes, y este nuevo hallazgo refuerza aún más la posición de Atapuerca como líder mundial en el estudio de la evolución humana".

José María Bermúdez de Castro, codirector del Proyecto Atapuerca y coautor del estudio, sueña y dice que "este hallazgo marca una nueva era prodigiosa para el Proyecto Atapuerca porque nos da nuevos datos sobre las olas migratorias que moldearon la historia humana y servirá para entender el origen y la dinámica del asentamiento humano temprano en Europa".

 

-Atapuerca identifica el fósil humano más antiguo de Europa occidental: «Puede tratarse de otra especie».

 Fuente: https://www.burgosconecta.es

 Atapuerca «ha batido por tercera vez el récord mundial de encontrar y estudiar el fósil humano más antiguo de la Europa Occidental», sostiene María Martinón-Torres, directora del Centro Nacional de Investigación Humana (CENIEH) ubicado en Burgos.

 Imagen secundaria 1 - Presentación de los restos de Pink hallados en Atapuerca.

Estos restos humanos fueron encontrados en 2022 durante la campaña de excavaciones en el yacimiento de la Sima del Elefante, en la Sierra de Atapuerca. Un enclave único y prolijo para el estudio de la evolución humana. Se trata de un fragmento facial humano datado entre 1,1 y 1,4 millones de años. Gracias a esta datación se erige como la cara más antigua conocida de Europa occidental.

Además, ya tienen nombre, Pink, en alusión al álbum 'La cara oculta' del conocido grupo Pink Floyd y también en homenaje a la doctora Rosa Huguet, investigadora del IPHES-CERCA quien junto al doctor Xosé Pedro Rodríguez-Álvarez coordina los trabajos de excavación e investigación en el yacimiento de la Sima del Elefante.

José María Bermúdez de Castro, codirector del proyecto Atapuerca y codirector de este estudio, explica la relevancia de este hallazgo de una forma clara y concisa: «los yacimientos burgaleses han constatado la existencia en Europa de una especie de la que hasta ahora no teníamos registro».

El estudio ha sido portada de Nature, la revista científica más destacada del mundo. Este resto de mandíbula se ha comparado con los fósiles encontrados de Homo antecesor y Homo sapiens porque «ambos comparten una cara de aspecto más moderno y la proyección de los huesos de la nariz», explica Martinón. Pero la puerta está abierta, porque, como recalca, la investigación está en desarrollo y «existe la posibilidad de que pertenezca a otra especie».

 El estudio de este hallazgo publicado en la revista Nature y liderado por la Dra. Rosa Huguet, es fruto de la colaboración entre una amplia representación de personal investigador y técnico del IPHES-CERCA y la URV, así como de otras instituciones nacionales e internacionales, entre las que destaca el Centro Nacional de Investigación sobre la Evolución Humana (CENIEH) por su papel en el análisis e interpretación del resto humano.

De momento, Pink se ha catalogado como ATE7-1 y ha sido atribuido a Homo affinis erectus. «El rostro de Pink es más primitivo, con rasgos que recuerdan más a Homo erectus, sobre todo por su estructura nasal, plana y poco desarrollada», explica Martinón. Lo que está claro para el equipo investigador es que representa una pieza clave para comprender las primeras migraciones y la evolución de los homínidos en Europa durante el Pleistoceno inferior.

 «No muestran rasgos encontrados en fósiles del Homo antecessor», afirma en Nature Rosa Huguet, autora del reciente estudio e investigadora en el Instituto Catalán de Paleoecología Humana y Evolución Social (IPHES-CERCA). 

 Hasta la fecha se ratificaba que el Homo antecessor era el homínido más antiguo que habitó en Europa. Ahora se conoce que una especie anterior, de la que aún no se ha confirmado su procedencia, convivió en tierras burgalesas.

Los fragmentos de Pink han requerido un laborioso trabajo de reconstrucción en el laboratorio de conservación y restauración del IPHES-CERCA. Se han empleado herramientas avanzadas de imagen y análisis 3D para su reconstrucción virtual en el CENIEH.

Se han necesitado más de dos años de investigación para concluir que esta cara no corresponde con Homo antecessor, sino a una especie más primitiva. Pero las evidencias no son todavía suficientes para lograr una clasificación taxonómica definitiva.

Se estima que los restos de Homo antecessor datan de hace 860.000 años. Pink es más antiguo, por lo que se sugiere que perteneció a una población que llegó a Europa en una oleada migratoria anterior a la de Homo antecessor.

 Imagen secundaria 2 - Presentación de los restos de Pink hallados en Atapuerca.

«Este yacimiento es clave para entender nuestros orígenes y el nuevo hallazgo refuerza el papel de Atapuerca como un referente mundial en el estudio de la evolución humana», asegura la doctora Marina Mosquera, directora del IPHES-CERCA e investigadora del proyecto Atapuerca. «Estos trabajos de excavación nos permiten profundizar en nuestros orígenes», apunta Mosquera.

Martinón-Torres destaca el papel del CENIEH, centro ubicado en Burgos, como Instalación Científica y Técnica Singular. «Aplicamos técnicas y métodos del futuro para estudiar el pasado», asegura. Se refiere a esas técncias empleadas para reconstruir virtualmente Pink y que han concluido en asignarlo a una población hasta ahora no documentada en Europa.

 

viernes, 28 de febrero de 2025

-El Museo de Burgos expone el ajuar tardorromano de la Necrópolis del Millar (Villa romana de Cardeñajimeno).

 Enlace: https://www.burgosconecta.es/

El Museo de Burgos ha incluido en su exposición de Nuevos Ingresos un ajuar de la época tardorromana, datado entre los siglos IV y V d. C., procedente de la necrópolis del Millar, situada en San Medel, localidad perteneciente a Cardeñajimeno.

 Piezas del ajuar tardorromano.

Se trata de un conjunto de piezas que sirvieron como ajuar funerario a una persona adulta enterrada en una de las tumbas más destacadas del cementerio particular de esta villa romana, la tumba IX. El enterramiento está formado por una fosa reforzada con grandes lajas de piedra caliza en los laterales y, a juzgar por la riqueza de los enseres encontrados, debió de gozar de una elevada posición social y económica. Es por ello que se sospecha que fuera un miembro destacado de la familia propietaria de la villa.

 La pieza más llamativa del ajuar, encontrada a los pies del difunto, es un lujoso puñal perteneciente al denominado «tipo Simancas», muy característico de las «Necrópolis de Duero» de este momento. Tiene la hoja de hierro y el filo sinuoso y se complementa con un pomo de bronce de forma abalaustrada. La vaina se halla forrada con una lámina de bronce en el reverso y una espectacular placa de plata en el anverso decorada con motivos repujados. Este «estuche» cuenta en la parte posterior con una pieza en 'S' rematada en ganchos que servía para su anclaje al cinturón.

Vinculadas a la daga y a su sujeción se han hallado también dos anillas de bronce. Este tipo de puñal se ha interpretado como un símbolo propio de la aristocracia terrateniente bajoimperial, dueña de grandes fincas rústicas, que estaría relacionado con la práctica de la caza como una actividad propia de esta clase social.

 Entre el resto de elementos se encuentran un cubilete de plomo con tapadera, depositado a la izquierda de la cadera del difunto, y dos recipientes de bronce, un caldero (acetre) de reducido tamaño con dos pestañas para anclar el asa situado junto al puñal, y un botecito cilíndrico (píxide) asociado a un pomo o tapón cónico junto al pie derecho del esqueleto. Ambos están confeccionados con una delgada lámina de metal y su función no está del todo clara, pudiendo haber contenido líquidos, perfumes o productos relacionados con el ritual funerario o ser simplemente parte del utillaje doméstico de la persona enterrada.

Es uno de los hallazgos más destacados de la arqueología burgalesa de los últimos años y se exponen por primera vez al público hasta el mes de junio. La zona residencial fue objeto de excavaciones en los años 70 y de allí procede también el gran mosaico de Atalanta y Meleagro, expuesto en el patio de la Casa de Miranda.