Durante la primera década del siglo XXI, el yacimiento de la cueva de
la Gran Dolina de la sierra de Atapuerca ha seguido proporcionando
fabulosos tesoros científicos. Entre los más significativos, destacan un
buen número de fósiles de la especie 'Homo antecessor'
hallados en dos estratos distintos del nivel TD6. Dos húmeros, uno de
ellos infantil (ATD6-121) y el otro perteneciente a un adulto muy joven
(ATD6-148), han aportado mucha información para esclarecer el origen de
la especie.
Los dos húmeros muestran signos inequívocos del proceso de
canibalismo que tuvo lugar en la cueva hace 900.000 años. El húmero del
adulto fue quebrado con un golpe certero para obtener la médula. El
impacto, seguramente producido con una piedra, se aprecia a simple
vista. La fractura de la diáfisis tiene forma en espiral y es una clara
evidencia de que la rotura se produjo en el hueso fresco. Las marcas de
descarnado para extraer las masas musculares son numerosas y espectaculares.
Además, las dos cóndilos de la epífisis distal, donde se insertan
números músculos que permiten flexionar el brazo y los dedos, fueron
destrozados a golpes para separar las masas musculares.
A pesar de los daños, aún es posible estudiar varias de sus
características anatómicas. El húmero ATD6-148 corresponde a un brazo
izquierdo. Es muy robusto y presenta inserciones musculares muy
desarrolladas. Sin duda, el brazo de este joven adulto fue tan potente como el de nuestro Rafa Nadal.
De ahí el nombre con el que hemos querido bautizar el fósil, y que
también quiere ser un guiño a los enormes éxitos del deporte español en
un momento tan particular, sobre el que no me parece necesario dar más
explicaciones. No podemos determinar si este húmero era de un hombre o
de una mujer. Las dimensiones no son concluyentes. Pero este detalle no
es importante. El húmero RAFA pasará a la historia de la evolución
humana con todos los honores.
Sin querer entrar en detalles complejos, la anatomía de los dos
húmeros (que se suma a otras evidencias anatómicas) sugiere que la
especie 'Homo antecessor' está relacionada con los neandertales y sus
antecesores del Pleistoceno Medio. 'Homo antecessor', 'Homo
heidelbergensis' y 'Homo neanderthalensis' serían especies hermanas, hijas de un mismo «padre», que
posiblemente evolucionó durante milenios en el sudoeste de Asia. Los
homínidos que colonizaron Europa llegaron en momentos distintos y
parecen conservar una herencia genética común, que nos permite rastrear
tanto su origen como sus relaciones de parentesco filogenético.
Fuente: www.elmundo.es Jose María Bermúdez de Castro
No hay comentarios:
Publicar un comentario