viernes, 25 de julio de 2014

-Nuevos sondeos acercan el karst de Atapuerca a cronologías africanas.


Los yacimientos de Atapuerca podrían deparar nuevas sorpresas cuando se conozcan los resultados de los sondeos que se están llevando a cabo para conocer la antigüedad del sistema kárstico. Según los primeros indicios, podría haber sedimentos de entre 1,5 y 2 millones de años, lo que les acercaría a cronologías africanas como las de Olduvai (Tanzania).
Los propios codirectores han sido los encargados de abrir manualmente un sondeo a los pies del yacimiento de Gran Dolina, en el que se encontraron hace 20 años los primeros restos de Homo antecessor, la nueva especie datada en 900.000 años, y la idea es seguir haciendo más en sucesivas campañas. «Nuestra hipótesis era que no íbamos a encontrar nada más antiguo de 1,5 millones de años pero empezamos a pensar que se podíamos cambiarla al haber cuevas abiertas y registros más antiguos. Pensamos que podemos tener cronologías como las de Olduvai en la Trinchera del Ferrocarril», indicó Eudald Carbonell, codirector de las excavaciones de Atapuerca.
Prospección que se ha realizado al pie de Gran Dolina para estudiar la geofísica de Atapuerca. Luis López Araico
En el mismo sentido, Juan Luis Arsuaga, otro de los codirectores, asegura que la formación del karst es más antiguo de que lo que se pensaba. «Para que haya relleno tiene que haber formación de cavidades. Creo que el gran tesoro por descubrir y que convertirá de nuevo a Atapuerca en un yacimiento histórico es el nivel TD6 de Gran Dolina. Cada año nos falta menos para llegar», apuntó.
Todas las cuevas de la Sierra de Atapuerca estaban conectadas, es decir, formaban parte de una misma red kárstica, aunque no estén comunicadas en la actualidad. Los investigadores las estudian desde la superficie, con métodos de prospección geofísica, para averiguar por dónde van las galerías y cómo se cruzan. Según avanzó Eudald Carbonell, la idea es trabajar cuatro o cinco años en este ámbito y alcanzar también cronologías del Paleolítico Superior, similares a los de las cuevas de Altamira.
De este modo, los científicos podrían reconstruir la evolución humana desde la actualidad hasta hace 1,5 millones de años y todo ello en un mismo espacio (hasta ahora el resto más antiguo es una mandíbula de 1,3 millones encontrada en la Sima del Elefante). «Tenemos el mejor registro fósil de Eurasia y debemos seguir apostando por este proyecto científico porque aportará mucha información sobre la evolución humana».
La idea es continuar con estos sondeos en la superficie que está por encima de la Trinchera del Ferrocarril. «Queremos saber si debajo de Gran Dolina hay cronologías de 1,7 millones de años como las de Olduvai. Hemos abierto el melón y en Atapuerca hay trabajo para muchos años», añadió Carbonell.

La actual campaña de excavación, que se inició el pasado 2 de julio, echa el cierre y mañana la consejera de Cultura, Alicia García, presentará los hallazgos junto a los tres codirectores, así como también el Congreso Internacional de Ciencias Históricas y Protohistóricas que se celebrará en Burgos y reunirá a más de 3.000 científicos de todo el mundo.
Al igual que ocurriera en 2013, la de este año ha durado solo un mes. Sin embargo, la previsión es que la de 2015 vuelva a extenderse durante mes y medio como consecuencia de la recuperación económica. Además, de la financiación de las excavaciones, la Junta ha cedido gratuitamente la residencia Gil de Siloe para la estancia de los investigadores de fuera.
La campaña se han centrado en los yacimientos de Gran Dolina, Galería, Sima del Elefante, Portalón, Sima de los Huesos, Galería de las Estatuas y el asentamiento al aire libre Fuente Mudarra. Durante la jornada de ayer se inició también la limpieza de la Trinchera para dejarla preparada para la visita científica de septiembre.

Fuente:http://www.diariodeburgos.es/noticia/ZF5CD5CF5-B55F-ADC1-DEDD4327B0D879C5/20140724/nuevos/sondeos/acercan/karst/atapuerca/cronologias/africanas 

jueves, 24 de julio de 2014

-El MEH acoge los grandes hallazgos africanos sobre la evolución humana.

También se exhiben grandes fósiles de animales extinguidos. ValdivielsoEl barranco del río Olduvai es la mejor máquina del tiempo que existe. Sus cárcavas han conservado restos fósiles que representan la evolución de la especie entre dos millones de años y la actualidad. Este privilegiado rincón de Tanzania, en cuya sabana pastan jirafas, ñus y cebras, ríen hienas manchadas, corren leopardos, rugen leones y sobreviven los masai, es la Cuna de la Humanidad, el lugar que ha alumbrado los mayores descubrimientos, aquellos que han permitido a los investigadores explicar el lugar y el tiempo de los que procede el hombre. Hallazgos trascendentales que se exhiben desde ayer en el Museo de la Evolución Humana en una exposición única, puesto que los restos que se muestran jamás habían salido antes del continente africano; una exposición que, en palabras Juan Luis Arsuaga, director científico del MEH, supone alcanzar uno de los principales objetivos con que se diseñó el centro: ser el lugar en el que presentar a la sociedad los sucesos más novedosos con respecto a la evolución humana. «Hoy consideramos cumplido este objetivo. Es un día muy importante», subrayó Arsuaga durante la inauguración.

La exposición, que narra estos orígenes, responde a preguntas universales: ¿quiénes somos? ¿de dónde venimos? ¿por qué y para qué estamos aquí? ¿a dónde vamos? Y lo hace a través de cinco grandes ámbitos, en los que se narra la importancia arqueológica y paleontológica de esta zona del norte de Tanzania en la que están representadas todas las etapas de la evolución humana, desde las primeras especies de Australopithecus hasta poblaciones más modernas de cazadores recolectores. Consta de un centenar de herramientas originales que muestran el desarrollo tecnológico de estos homínidos desde hace dos millones de años y, sobre todo, exhibe las reproducciones de restos de Australopithecus, de los primeros Homos y de los sapiens más arcaicos junto a fósiles tan emblemáticos como Lucy o el niño de Taung. Asimismo, la exposición, que podrá verse en el MEH hasta diciembre, exhibe piezas fósiles originales de animales extinguidos que convivieron con los homínidos realmente impresionantes por su tamaño y conservación.
Enrique Baquedano, director del Museo Arqueológico Regional de la Comunidad de Madrid, uno de los directores de las excavaciones de este privilegiado yacimiento tanzano desde hace una década y a la sazón comisario de la exposición, destacó que la estrella de ‘La Cuna de la Humanidad’ son los fósiles de OH80, descubierto en Olduvai; se trata de restos craneales y dentales «que nos permitieron conocer la anatomía de los parántropos, una especie muy peculiar, que aunque no está en el linaje humano es un homínido muy codiciado por todos los paleantropólogos», subrayó.


Fuente:  http://www.diariodeburgos.es/noticia/ZC1C9B2DC-98BB-6771-A0DD784AE9C87D3A/20140723/meh/acoge/grandes/hallazgos/africanos/evolucion/humana

-Inscripción sobre los mártires de Cardeña.


miércoles, 23 de julio de 2014

-Una visita a San Pedro de Cardeña.



-Los 23 individuos de El Mirador son similares a poblaciones alemanas.


El yacimiento de la Cueva de El Mirador funcionó como una cámara dolménica hace 4.400 años, en el periodo Calcolítico (entre el Neolítico y la Edad del Bronce). Hasta el momento los investigadores han conseguido sacar a la luz los restos de 23 individuos y las primeras pruebas de ADN confirman que tienen parecidos con las poblaciones neolíticas alemanas. Las razones de esa similitud las determinarán nuevos estudios, así como también si pertenecían o no a una misma familia o a un mismo grupo. 
Los restos encontrados se encuentran en muy buen estado de conservación. Pueden verse diferentes partes del cuerpo (el fémur derecho ha servido para determinar el número de individuos), sin embargo los científicos estaban extrañados de que faltaran varios cráneos. El misterio ha quedado resuelto esta campaña al seguir excavando más a fondo: estaban colocados en las paredes de la cueva debido a la reutilización del sepulcro. Se han recuperado ocho. «El cráneo es el elemento que tiene más volumen, como el sepulcro se iba reutilizando, el cráneo molestaba en la zona central y lo apartaban. De este modo, en la parte central de esta cavidad los cuerpos aparecen en conexión anatómica y hacia el perímetro aparecen huesos sueltos. Siempre es la misma dinámica. Sería un poco como pasa en los cementerios actuales», apuntó Josep María Vergés, coordinador de las excavaciones en este yacimiento. 
Poco a poco se van conociendo más datos sobre los usos que tuvo esta cueva.  Miguel Ángel Valdivielso Hasta el momento se han contabilizado 23 individuos (uno ha salido a la luz esta campaña) y todo indica que podría ser la cifra definitiva. La mayoría de ellos tienen entre 20 y 40 años y sorprende sobremanera que la escasez de individuos infantiles. «Lo normal es que hubiera más individuos infantiles, debido a que la mortalidad a esas edades era alta, pero hay 3 o y el resto son adultos», añadió el investigador.

Tampoco se ha determinado cuántos son hombres y cuántas mujeres y si estaban o no emparentados. «Si eran de la misma familia el enterramiento se prolongaría durante muchos años pero si son de una comunidad o de distintos grupos familiares sería un periodo más corto. Hasta ahora nos hemos centrado más en caracterizar a la población para ver a qué otras poblaciones se parecen y no tanto el sexo».
Precisamente, los análisis de ADN practicados a estos restos fósiles han puesto de manifiesto su enorme parecido con los grupos del Neolítico de Alemania. «Parece que hay relaciones con Alemania, no se sabe si unos bajan o otros suben... Tenemos que seguir trabajando sobre el tema. El ADN está bien conservado, lo que permite obtener mucha información».
Vergés aseguró que el estudio genético de las poblaciones requiere mucho tiempo y, además, es una disciplina relativamente reciente. «Todos los datos nuevos que obtengamos son muy interesantes y permitirán establecer el mapa genético». 
 
Precisamente, la revista científica Postone publicará próximamente un artículo sobre la genética de los individuos de la cueva de El Mirador. Y es que este yacimiento tiene una de las secuencias más completas y antiguas del Neolítico de la península. Las secuencias están completas y separadas, lo que permite hacer una radiografía cultural y ambiental de los antiguos pobladores. 
Otro detalle que ha llamado la atención de los investigadores es que los restos no tienen ofrendas junto a ellos. «Eran muy austeros. Solo hemos encontrado tres cuencos lisos sin decoración, conchas fluviales nacaradas, candiles de asta de ciervo y una aguja para el moño de hueso».
 
Fuente: http://www.diariodeburgos.es/noticia/Z8A08477D-DBCE-81B5-E8923759BCF856C1/20140722/23/individuos/mirador/parecen/poblaciones/alemanas

-"La Cuna de la Humanidad" reúne en el MEH la evolución humana africana y europea.

 Miguel Ángel ValdivielsoEl Museo de la Evolución Humana acoge desde hoy y hasta el mes de diciembre una muestra única: ‘La Cuna de la Humanidad’. Una exposición internacional que reúne en un mismo espacio 200 piezas, muchas de ellas originales, que dan cuenta de la evolución humana africana y europea. Los yacimientos de la Sierra de Atapuerca y los africanos de la Garganta de Olduvai y Laetoli son los protagonistas en una exposición que después itinerará por países como EE.UU. y Alemania. La consejera de Cultura, Alicia García, acompañada del director científico del MEH, Juan Luis Arsuaga; el comisario de la muestra, Enrique Baquedano; el alcalde de Burgos, Javier Lacalle; el presidente de la Diputación, César Rico, y el delegado de la Junta, Baudilio Fernández Mardomingo, acudió a la inauguración de una exposición que muestra al visitante cómo surgió el género humano remontándose a casi cuatro millones de años en África hasta el momento actual.

"Una exposición que cobra mayor importancia en cuanto a que vamos a poder visitar los descubrimientos en el MEH", dijo García, quien entiende que el hecho de unir los yacimientos africanos con los burgaleses es si cabe "lo que la convierte en única y magnífica". Una unión entre hallazgos que son Patrimonio de la Humanidad y que dan forma a una exposición que cuenta con la colaboración de la Junta de Castilla y León, la Comunidad de Madrid, a través del Museo Arqueológico Regional, así como la ayuda del Ministerio de Cultura de Tanzania. La coproducción tiene como principal cometido dar a conocer la importancia que ha tenido la Garganta de Olduvai en la Historia de la Humanidad, al tiempo que pretende posicionar a Atapuerca y al MEH a un nivel internacional sin precedentes. Así lo explicó la consejera, quien recordó que la exposición sirve también de homenaje a los investigadores que durante décadas han trabajado en ambos yacimientos, con una mirada especial a los españoles. "También queremos rendir homenaje a uno de los mejores de los nuestros, a Emiliano Aguirre", destacó García, quien entiende como obligado rendir un tributo al primer director de los yacimientos de Atapuerca.

Gran actividad del MEH. La exposición ‘La Cuna de la Humanidad’ viene a completar "la gran actividad que tiene el MEH". Así lo expresó García, quien recordó que en los primeros seis meses de 2014, el Sistema Atapuerca ha tenido un incremento del 36 por ciento en el número de visitantes llegando a los 216.000. Del total, 153.000 han visitado el Museo de la Evolución Humana, lo que para García es un claro síntoma de que la exposición va a ser visitada por miles de personas. En la misma línea, Arsuaga afirmó sentirse "feliz" por la llegada de una exposición que permite "cumplir el objetivo" del nacimiento de la pieza central del Complejo de la Evolución Humana.  "A mi me gusta mucho la exposición porque es de primer nivel internacional", reconoció el científico, quien considera que "se cumple un proyecto" al poder traer al MEH exposiciones "de categoría".

Satisfecho con el trabajo conseguido cuando se acaban de cumplir cuatro años desde que el MEH abriera sus puertas, Arsuaga consideró que "puede verse todo" desde los inicios de la especies hasta la especie Neandertal haciendo un recorrido "fascinante". "Ésto cierra el diseño del MEH y viene a completar el proyecto", aseveró.  El comisario de la exposición fue el encargado de explicar el contenido de una exposición que tras pasar por el MEH itinerará el próximo año por América y Alemania. "Es la primera vez que salen estos fósiles de África", aseveró el especialista, al tiempo que concretó que buena parte de la exposición se compone de aquellos estudios que realizó la familia Leakey a mediados del siglo XX.

"En la exposición damos cuenta de cómo se ha producido la evolución en el mundo africano desde el australopitecus pasando por Homo Hábilis, Ergaster hasta el Heildelbergensis sin olvidarnos de los Sapiens arcaicos", destacó Baquedado. Asimismo, hay piezas únicas como herramientas originales y fauna original.  Dividida en cinco grandes apartados, la exposición muestra más de cien herramientas originales algunas de ellas con una antigüedad cercana a los dos millones de años. Además, cuenta con reproducciones de moldeado en directo y escaneado en 3D, que muestran restos de Australopitecus, de los primeros homos, junto a fósiles tan emblemáticos como Lucy o el niño de Taung.


Fuente:  http://www.diariodeburgos.es/noticia/ZAA3893E4-D6D6-79D6-1CD405C3D59178FA/20140722/cuna/humanidad/reune/meh/evolucion/humana/africana/europea

jueves, 17 de julio de 2014

-Atapuerca se asoma a los dos millones de años.

Los yacimientos de Atapuerca envejecen cada vez más. El amplio conocimiento que el equipo está tomando de todo el complejo kárstico permite definir que a los ocho yacimientos abiertos en las últimas campañas se podrían sumar otro medio centenar de cuevas con sedimento pero sin conocer aún si será fértil o no, es decir, si tendrá fósil de fauna, industria lítica y, los más deseados, los fósiles humanos. «Tenemos la hipótesis que hay otras cuevas en la parte superior con cronologías más antiguas que aquí en Trinchera y que podrían llegar a tener entre 1,9 y dos millones», reflejó ayer Eudald Carbonell. Esta circunstancia se da en yacimientos que se encuentran por encima de Trinchera que, al estar descolgados, tiene un perfil más pronunciado y son más antiguos. «Estamos hablando ya de cifras cercanas a Olduvai (África) pero en Europa», puntualizó.

El abarcar estas nuevas áreas de excavación así como trabajar en el nivel TD-6 de Gran Dolina, donde hace 20 años aparecieron los primeros restos de Homo antecessor, son algunos de los retos que afrontará el actual equipo director en los próximos siete u ocho años, antes de su jubilación. «Atapuerca acaba de empezar, los grandes descubrimientos se van a continuar sucediendo, sabemos dónde están los fósiles pero hay que excavar con orden», puntualizó Carbonell.

En la misma línea José María Bermúdez de Castro expresó la importancia del trabajo de geólogos y geocronólogos para conocer la formación de los yacimientos. «Al principio estábamos muy despistados, es una sierra complicada hay que saber entenderla, porque esto es algo más que coger fósiles y punto, hay que conocer bien el terreno para poder llegar a buenas conclusiones», señaló. Como ejemplo situó Dolina que en los años 80 se dató con un máximo de 400.000 a 500.000 años y ahora se están realizando dataciones casi diarias de arqueomagnetismo en el nivel fértil más bajo (TD-4) que podrían superar el millón de años. «Si no tenemos un buen contexto en los yacimientos, sino entendemos lo que ha pasado aquí, cualquier fósil que encontremos de animal o humano no lo entenderemos bien, es un trabajo de fondo que no da resultados espectaculares pero que ayuda a contextualizar un gran descubrimiento».

En esta línea volvieron a incidir en la importancia de la ocupación casi sistemática de la sierra estableciendo, además, posibles usos de mismos grupos de homínidos en diferentes cuevas. Así sucede por ejemplo con la población de la Sima de los Huesos cuyas características morfológicas se encuentran en el yacimiento donde hay restos de 28 esqueletos de diferentes edades. Pero ahora mismo se excava en los niveles TD-10-3 y Galería las mismas cronologías. «Es muy importante para saber contextualizar todo y nos dará idea del uso que hacían del entorno», apuntó Bermúdez de Castro.

Respecto a la población de la Sima, Arsuaga aclaró que el equipo ha accedido en esta semana a la zona con restos humanos. «Nos pueden servir para completar lo que tenemos, no creo que sean grandes fósiles pero servirán para completar y reconstruir los esqueletos completos que tenemos porque es muy poco frecuente que aparezcan restos muy grandes», señaló Juan Luis Arsuaga.

Afirmó que la riqueza de la Sima de los Huesos, donde se han recuperado más de 6.000 restos humanos adscritos hasta hace unas semanas a Homo heidelbergensis, obliga a replantear el mapa evolutivo. «Tenemos la oportunidad con la riqueza que tenemos aquí, de replantearnos todo, de hacer propuestas» en las que Atapuerca «tiene que ser una referencia obligada» porque hay restos de 1,3 millones de años, está la especie antecessor de entre 850.000 y 900.000 años y la población de la Sima. Un nuevo mapa evolutivo que se  perfilará en los congresos de Burgos y Florencia este mes de septiembre y para el que el equipo de investigación de Atapuerca presentará una propuesta para su publicación científica a finales de año porque «las especies están definidas a partir de restos muy fragmentarios y es un panorama que debería cambiar», concluyó.

Fuente: http://www.elcorreodeburgos.com/noticias/2014-07-16/atapuerca-se-asoma-a-los-dos-millones-de-anos

miércoles, 16 de julio de 2014

-Los codirectores prometen que este año Atapuerca «dará sorpresas».

Un grupo de investigadores, en el Portalón. Ricardo Ordóñez
No será hasta el próximo día 25  cuando los responsables de Atapuerca, acompañados por la consejera de Cultura de la Junta, Alicia García, descubran ante los medios los restos que han salido de las entrañas de la tierra en esta campaña denominada «de transición», momento para el que ayer se prometieron «sorpresas», en palabras de uno de los codirectores, Eudald Carbonell, quien insistió en que Atapuerca «está empezando» y  garantizó que «los grandes descubrimientos se seguirán produciendo porque ya sabemos dónde están los fósiles».
Junto a sus compañeros Juan Luis Arsuaga y José María Bermúdez celebraron el clásico encuentro con la prensa en el año de la celebración del congreso internacional que reunirá en el mes de septiembre a más de mil paleontólogos de todo el mundo en Burgos y recordaron que el yacimiento de Sima de los Huesos, donde se han encontrado más fósiles juntos que en ningún otro espacio del continente europeo, podría dar origen al nombramiento de una nueva especie tras la revisión que en los próximos meses se llevará a cabo con el ánimo de actualizar el mapa de la evolución humana. Así lo precisó Arsuaga, partidario de una revisión que situaría a la Sierra de Atapuerca en una situación privilegiada al contar con una especie propia como es Homo antecessor (800.000-900.000 años) y una segunda aún por determinar, la de Sima de los Huesos (430.000 años).

 La revisión del mapa de especies es uno de los temas «de los que más se hablará hasta finales de año», según Arsuaga, partidario de cambiar una taxonomía «anticuada» que se dio por buena hace más de un siglo cuando poco o nada se conocía de la sierra burgalesa. Ha sido precisamente Atapuerca y la aparición de miles de fósiles de dos especies determinadas (Homo heilderbergensis y Homo antecessor) la que ha llevado a los científicos a plantearse el reto de convencer a la comunidad internacional de que es necesario incluir y restar especies.
Arsuaga considera que el hecho de que se haya encontrado a los «tíos abuelos» de la especie Neandertal- considerados esos 17 cráneos hallados en la Sima de los Huesos como el nexo más próximo con los neandertales- una de esas nuevas especies a incluir en la nueva taxonomía: «Cuando replanteemos todo hay que intentar que no se multipliquen las especies. Para incluir unas hay que quitar otras».
El responsable de la Sima de los Huesos declaró que para entender el cambio hay que pensar que «estamos trabajando con especies que fueron delimitadas hace más de un siglo». En el caso del Homo heilderbergensis, la definición se remonta a 1908 y a una mandíbula de un individuo de esta especie,  restos «muy pequeños», que algunos entienden como «insignificantes» cuando en la Sima de los Huesos se han encontrado miles de esta especie que ayudarían a clarificar mejor la vida de los individuos. «Hay mucha gente que se nos resiste», confesó Arsuaga, al tiempo que explicó que los pesos pesados a los que habrá que «convencer» son Estados Unidos, Inglaterra, Francia o Alemania.
Si estas pretensiones llegan a buen puerto, para finales de año  habría un patrón evolutivo clarificado. «Haremos una propuesta seria y Atapuerca es donde están los registros», añadió Arsuaga, quien entiende que el yacimiento «debe ser el centro de ese nuevo planteamiento y una referencia obligada». La especie Antecessor sería una de las que se incluiría en esa nueva taxonomía internacional, al tiempo que se sumaría una segunda especie «al haber un hueco entre el Heilderbergensis y lo que se ha hallado en Sima de los Huesos».


Fuente:  http://www.diariodeburgos.es/noticia/Z59C5F602-0AB9-9E6F-AC6435CF699D5933/20140716/codirectores/prometen/a%C3%B1o/atapuerca/dara/sorpresas

sábado, 5 de julio de 2014

-Campaña de excavaciones en Clunia de 2014.


Cueva Román, en el subsuelo de la ciudad romana, accesible solo para los espeleólogos. clunia.es Después de tres años de parón, el primero de ellos por las obras de adecuación del teatro para acoger representaciones y los dos siguientes víctima de los recortes motivados por la crisis económica, la tradicional campaña estival de excavaciones retorna a las  ruinas de la ciudad romana de Clunia como se venía realizando desde 1996 con cargo a los fondos de la Diputación Provincial, propietaria del yacimiento.
Tras muchas temporadas centrados a la hora de realizar exhumaciones en el teatro, donde los trabajos están prácticamente finalizados, el equipo de investigación va a cambiar este año el objetivo. Y en línea con el estudio encargado para buscar la singularidad del yacimiento, que concluyó que el principal elemento diferenciador de la antigua Colonia Clunia Sulpicia  respecto a otros enclaves romanos es su sistema de abastecimiento de agua  desde Cueva Román, un conjunto cárstico formado por galerías y lagunas subterráneas que alimentan los numerosos manantiales  que afloran en las laderas y que puede ser  explotado desde la ciudad mediante la realización de pozos, se van a centrar en esta infraestructura urbana.

Un conjunto cuyo interés estriba además en que en una pequeña cavidad alberga también un santuario priápico -Priapo era el dios de la  fertilidad- con figuras itifálicas (falos erectos) y máscaras  en barro tierno, algunos de ellas con inscripciones realizadas con los dedos o algún objeto punzante, destacable no solo por su valor simbólico sino también por el social que encierra.
El arqueólogo Francesc Tuset, codirector del equipo de investigador de Clunia junto al arquitecto Miguel Ángel de la Iglesia, avanzaba que la excavación de este año  se va a enfocar a la construcción de un nuevo acceso  más fácil a Cueva Román, ya que la entrada actual, reservada prácticamente en exclusiva a espeleólogos por su dificultad, impide introducir el material técnico necesario para llevar a cabo un estudio en profundidad de esa zona.

La idea es aprovechar un pozo vertical que conectaba con la superficie pero que hasta ahora solo se conocía desde el interior una vez que se ha localizado el punto donde puede ubicarse la boca gracias a unos trabajos de cartografía que han realizado con ayuda de novedosos mecanismos de radiofrecuencia.
«La idea es hace una entrada más fácil para poder acceder  arqueólogos y espeleólogos a la cueva. Siempre hemos tenido que entrar por un acceso bastante complicado que dificulta el poder entrar con equipos y poder tener buena iluminación  y lo que sea... Se trata de poder acceder para documentar, fotografiar, documentar...», indica Tuset,  quien subraya que además del interés turístico de la Diputación por poner valor este enclave, también han apostado por centrar en el las excavaciones por su excepcional valor científico.
El inicio de las excavaciones está pendiente de la llegada de un permiso por parte del área de Patrimonio de la Junta de Castilla y León, pero los investigadores confían en que los trámites estén solventados antes de finales de julio.


Fuente: http://www.diariodeburgos.es/noticia/Z25219F84-F0A3-167A-077E7C740999467C/20140705/excavacion/clunia/centrara/nuevo/acceso/cueva/roman

Este año se prevé una campaña corta, puesto que el movimiento de tierras se va a limitar al vaciado de la parte superior del pozo. En cualquier caso a nivel de obras se contemplará además  la instalación de compuertas para   mantener la estanqueidad de la cueva y una caseta en la superficie para evitar que pueda haber corrientes de aire que alteren las condiciones de las cavidades y puedan afectar especialmente a las frágiles esculturas e inscripciones del santuario priápico.
 Francesc Tuset aclara que este  acceso no está concebido para la entrada de público, puesto que la delicadeza de los vestigios que guarda  Cueva Román desaconsejan totalmente su visita turística, y garantiza que «no podrá entrar nunca nadie, salvo los espeleólogos y los arqueólogos».
En cualquier caso para aprovechar el tirón turístico de este elemento singular y diferenciador, el  nuevo Plan Director de Clunia va a  contemplar la construcción de una recreación de Cueva Román y del santuario en el futuro nuevo centro de recepción de visitantes para que los turistas puedan apreciarla con todo lujo de detalles.

martes, 1 de julio de 2014

-Novela "Peña Amaya", de Pedro Santamaría.

Como una atalaya de 1.400 metros de altura se erige Peña Amaya. Este rincón en cuyo suelo brota la historia en cada piedra o peñasco es el elegido por el escritor Pedro Santamaría para recordar uno de los episodios que configuran la historia de Cantabria. Peña Amaya interesó al artista por un episodio del que hay pocas referencias históricas. La lucha de los pueblos cántabros contra el asedio de los visigodos en el año 572. Una novela para la que se ha valido de escasas referencias bibliográficas. Las referencias de Braulio de Zaragoza sobre la vida de San Millán. En ella se cuenta como el santo acude al Senado cántabro de Amaya para relatar su visión: la ciudad será tomada y para salvar sus almas deben convertirse al cristianismo. También acude a otras referencias escritas como la crónica de Juan de Biclaro que cuenta que con la conquista de Peña Amaya, Leovigildo toma Cantabria.

A partir de la conquista de los godos, Amaya será la capital, después con la reconquista el cerro será repoblado, con incursiones árabes. Llegó a tener poblado medieval pero de aquel rico pasado apenas quedan vestigios observables a primera vista. «Es un rincón abandonado en lo que al estudio arqueológico se refiere. Lo único que he podido tomar para documentar la novela han sido referencias históricas... Creo que con poco dinero se podrían hacer trabajos muy interesantes porque incluso cuando caminas ves trozos de cerámica, hay restos de los castros...», reivindica el autor.

Santamaría es licenciado en Derecho,  fue profesor de inglés y castellano en Taiwan pero es un apasionado de la Historia y por tanto de novelar determinados hechos. «Es una forma excelente de acercarse al pasado siempre me gustó la Historia como una forma de entender el presente pero también, quizás, por que es cierto eso que dicen que no hay mejor novela que los hechos pasados», reflexiona. Por otro lado, ve en este género la posibilidad de realizar «divulgación, de rescatar periodos poco conocidos o lugares un poco olvidados como sucede con este capítulo de la historia cántabra y Peña Amaya», señala.

En Peña Amaya, editado por Pamies, Santamaría retoma el duro enfrentamiento bélico entre el poderoso rey visigodo Leovigildo con las fieras tribus cántabras atrincheradas en esta atalaya donde habían dispuesto un sistema de autogobierno. La parte visigoda está relatada por un joven cronista de forma aséptica y burocrática. Estos escritos están presentes al final de cada capítulo y son «como un contraste ante la crueldad de la guerra». En el lado de los cántabros el relato es en tercera persona y se basa en dos hermanos. Necón, el guerrero, y Tomás, el monje, conocido como Urbico antes de convertirse al cristinanismo. Ambos «encarnan una lucha entre la espada y la palabra». Una historia apasionante que rescata del olvido un rincón singular de Burgos.

Fuente:  http://www.elcorreodeburgos.com/noticias/2014-07-01/la-historia-que-esconden-las-piedras